La recuperación del suministro y la normalización en hospitales e infraestructuras esenciales avalan el descenso La Junta de Andalucía ha solicitado al Gobierno de España la desactivación de la Declaración de Emergencia de Interés Nacional.
La petición se ha cursado al Centro Nacional de Seguimiento y Coordinación de Emergencias (Cenem) a las 15.30 horas de hoy martes. Esta declaración corresponde a la Situación
Operativa 3, del Plan Territorial de Emergencias de Protección Civil.
La recuperación del sistema eléctrico y la normalización paulatina de la situación en hospitales e infraestructuras esenciales han permitido la desescalada del
plan, según han informado fuentes del número único de emergencias, adscrito a la Agencia de Emergencias de Andalucía, de la Consejería de la Presidencia,
Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa.
De aceptarse la petición por parte del ministro de Interior, el Plan pasaría a Situación Operativa 2. Este nivel se refiere a emergencias que no pueden
controlarse o que hay riesgo de que no se puedan controlar con los medios ordinarios propios de la Junta de Andalucía y, sea necesario o vaya a ser
necesario la aportación de recursos y medios extraordinarios de la Administración General de Estado o de otras comunidades.
Red Eléctrica Española y la compañía suministradora Endesa informaron ya esta mañana de que el cien por cien de las subestaciones contaban con respuesta,
más allá de algunas incidencias por acoplamiento que se han ido atendiendo conforme se han ido notificando.
Por su parte, todos los centros sanitarios andaluces tienen restablecido el suministro eléctrico, según informa el Servicio Andaluz de Salud (SAS), a través
de la Consejería de Salud y Consumo. Así, el último hospital en recuperarlo ha sido La Inmaculada, de Huércal-Overa (Almería) alrededor de las 12.00 horas,
aunque algunos consultorios auxiliares de zonas puntuales de sierra de las provincias de Córdoba o Jaén pueden presentar aún incidencias.
La Junta de Andalucía ha mantenido hoy la actividad en los centros educativos, aunque sin carga lectiva. Está previsto que mañana se recupere la actividad
docente en todos los centros de la comunidad.
El 1-1-2 ha atendido desde el inicio del apagón general en España un total de 3.328 incidencias en Andalucía, desde las 12:00 horas del lunes 28 hasta las
14:00 horas de este martes.
Los avisos más requeridos al centro de coordinación han sido asistencias sanitarias (1.518), rescates y salvamento (295), incidencias de tráfico (267),
seguridad ciudadana (248), servicios sociales (203), anomalías en servicios básicos (162) y accidentes de circulación (100). Por provincias, los avisos se han concentrado especialmente en Sevilla (760) y Málaga (723), seguidas de Cádiz (423), Granada (393), Córdoba (336), Jaén (263), Almería (262) y Huelva (168). Red de transporte y suministros básicos
Los Metros de Sevilla, Málaga y Granada están operando con normalidad, así como el Trambahía y los autobuses metropolitanos.
En cuanto al suministro de servicios básicos, en el municipio almeriense de El Ejido, que sufrió cortes en el suministro, se está recuperando el abastecimiento
poco a poco, así se está procediendo a la reanudación del abastecimiento en núcleos como Balerma, Almerimar y Santa María del Águila y la zona norte,
mientras que informan que en la zona centro volverá en breve.
Comprobación del estado de los alimentos La dirección del Plan ha valorado muy positivamente la colaboración de los andaluces en el seguimiento de los consejos para evitar riesgos y anima a la ciudadanía a seguir manteniendo una actitud proactiva en su seguridad aprendiendo a actuar y anticiparse con la adopción de pautas antes de que las
emergencias se produzcan.
Desde la Dirección General de Salud Pública han ofrecido algunos consejos para evitar riesgos ante el consumo de los alimentos tras el apagón. En este sentido,
han señalado que un frigorífico ofrece una ventana de conservación segura de los alimentos de hasta cuatro horas durante un apagón, siempre y cuando la puerta permanezca cerrada la mayor parte del tiempo posible. Una vez superado este periodo, se debe evaluar cuidadosamente el estado de los alimentos almacenados, considerando el tiempo total sin refrigeración.
En cuanto a los congeladores, su capacidad para mantener los alimentos congelados durante un corte de luz es mayor gracias a la masa fría acumulada.
Un congelador a media carga puede mantener los alimentos seguros durante aproximadamente 24 horas, mientras que uno a carga completa puede extender
este periodo hasta 48 horas.
Sin embargo, es «vital» prestar especial atención a los alimentos altamente perecederos que requieren refrigeración constante. Carnes de aves, pescados,
otras carnes, alimentos con fechas de caducidad muy cortas que necesitan frío y las sobras de comidas son particularmente sensibles a las fluctuaciones de
temperatura. Si estos alimentos se han mantenido a temperaturas superiores a la de refrigeración durante más de dos horas, se recomienda desecharlos para
evitar riesgos para la salud.
Igualmente, se recomienda no probar ningún alimento para determinar si aún es seguro para el consumo. Es necesario evaluar cada alimento por separado,
prestando especial atención si los consumidores son personas vulnerables, como niños pequeños, ancianos, mujeres embarazadas o personas con
sistemas inmunológicos comprometidos. Se deben desechar aquellos alimentos que presenten cualquier signo de deterioro, como olor, color o textura inusuales.
Ante la menor duda sobre la seguridad de un alimento, la decisión más responsable es desecharlo. En aquellos casos en los que se decida conservar
algunos alimentos tras un corte de luz, es imprescindible cocinarlos a la temperatura adecuada para garantizar la eliminación de cualquier bacteria que
pudiera haberse desarrollado.