EE.UU. ataca un buque con drogas procedente de Venezuela en el Caribe
La jornada de este martes 2 de septiembre de 2025 quedará marcada como un punto de inflexión en la ya delicada relación entre Estados Unidos y Venezuela.
Un anuncio inesperado desde la Casa Blanca
Pasadas las 19:00 horas en Washington, el presidente Donald Trump sorprendía a la prensa desde el Despacho Oval con unas declaraciones que sacudieron el panorama internacional:
“Acabamos de disparar a un barco que transportaba drogas… muchas drogas en ese barco”, aseguró el mandatario republicano, confirmando así una operación letal en aguas del Caribe contra una embarcación que, según inteligencia estadounidense, había zarpado desde Venezuela.
Confirmación oficial de Marco Rubio
Pocos minutos después, el secretario de Estado, Marco Rubio, corroboró la acción militar en redes sociales. Según Rubio, el buque atacado estaba siendo operado por una “organización narcoterrorista sancionada por Washington”, lo que justificaba el uso de la fuerza naval en el marco de la nueva estrategia antidroga de la Administración Trump.
Escalada militar previa
La noticia no llega de manera aislada. En los últimos días, Caracas había denunciado la presencia de hasta ocho buques de guerra estadounidenses y un submarino nuclear en aguas próximas a su territorio. Washington, por su parte, argumentó que el despliegue forma parte de una ofensiva para cortar las rutas del narcotráfico que abastecen al mercado norteamericano.
La respuesta de Maduro
El presidente Nicolás Maduro no tardó en reaccionar, denunciando ante la CELAC lo que considera una “provocación imperialista” y alertando de que cualquier ataque directo contra Venezuela supondría la movilización de toda la nación en armas. Maduro sostiene que las acusaciones de narcotráfico son un pretexto para una intervención militar.
Repercusiones regionales
El ataque estadounidense eleva la tensión a niveles sin precedentes. Mientras algunos gobiernos de la región guardan silencio prudente, países como Cuba y Bolivia ya han expresado su apoyo a Caracas, denunciando la acción como un acto de agresión, mientras que en Colombia y Guyana comienzan a escucharse voces favorables a la estrategia de Trump.
Conclusión
La operación militar de EE.UU. en aguas del Caribe abre un nuevo capítulo de confrontación con Venezuela. Lo que se presenta como un golpe al narcotráfico amenaza con desatar una crisis regional de consecuencias imprevisibles.